AHORA SI ME VOY A MORIR DICE LA AMENAZA DE UNAS AGUILAS MUY NEGRAS
Por: Carlos Alberto Castaño Martínez.
Fecha de publicación: 5 de diciembre de 2014.
Facsimil de la amenaza, al final de esta ágina se observa que el panfleto se dirige a quien fundó la Galería de la Memoria.
Una vez más los engendros del mal amenazan con matar el pensamiento, las ideas y la Libertad de expresarlas. Amenazan con matar a muchas personas por pensar diferente. Dicen que matarán a mi familia para que sean las próximas fotografías a colgar en la exposición de la Memoria. Amenazan con palabras soeces, como sólo lo saben hacer aquellos que únicamente pueden con la violencia, porque la razón les infunde rabia, porque en su cerebro no cabe la razón. Esta amenaza es una muestra más de que hay un sector de la ultra derecha que no quiere que este país cambié socialmente para que el pueblo en su mayoría tenga derecho a vivir con dignidad. Me condenan por mantener viva la Memoria, pero también me condenan porque un día acosado por la muerte, por la misma muerte que hoy me amenaza, dicidí levantarme en armas para defender mi vida y mi dignidad.
En 1.990 esos mismos enamorados de la muerte me mataron, pero la vida me trajo de regreso, ahora entonces me dicen que tengo una deuda y que ahora sí voy a morir.
Esta nueva amenaza, me confirma una vez más, que la paz en Colombia nunca llegará. En 1.991, quienes hicimos parte del EPL firmamos un acuerdo de paz con el Gobierno y nos desmovilizamos. En el acuerdo nos comprometimos a dejar las armas como un medio de transformación social, en mi caso al menos no firmé para renunciar a mis principios, a mi conciencia y mucho menos a mi dignidad de seguir luchando por los derechos de mi pueblo.
Hace 11 años me dediqué a construir la Galeria de la Memoria, lo hice convencido de aquella hermosa frase de Nelson Mandela "la educación es el arma más poderosa que podemos usar para cambiar al mundo." De acuerdo a la respuesta del publico, hoy estoy más convencido que así es.
En junio de 2.007, me fue allanada mi casa por muchos militares, DAS, Sijín y Fiscalía bajo el supuesto que yo tenia armas y bombas en mi hogar. En esa ocasión solicité a la Fiscalía una explicación del por qué del allanamiento, y el mismo ente judicial me contestó que el allanamiento lo habían hecho por orden explicita de la Sexta Brigada del Ejército.
En esta amenaza me dicen que no se me olvide que tengo una deuda y que ahora si voy a morir. Que florezca la Memoria: el 27 de julio de 1.990, día en que fuí fusilado por paramilitares donde torturaron y masacraron a 7 campesinos, quienes los dirigían, eran militares activos del Batallón Bar Bula de Puerto Boyacá.
No me queda entonces ninguna duda de quiénes son los que amenazan y mucho más cuando en el comunicado dicen que en esas fotos me dedico a ensuciar la "honorabilidad de los soldados y policías."
Responsabilizo al Gobierno de Colombia y a su fuerza Pública de cualquier situación que se presente con mi familia y conmigo mismo como consecuencia de esta amenaza.
De igual manera invito a todos los compañeros de los diferentes medios alternativos que aparecen comprometidos en la amenaza hacerla pública y exigir al Gobierno una investigación a fondo y sin vacilaciones para que ésta no quede en la impunidad.
Y no olvidemos esta frase del Che: "Si avanzo seguidme, si me detengo empujadme, y si retrocedo matadme"