Las noticias de hoy no tienen desperdicio:
"Los mercados se han desplomado" —continúan informando los cables—, "el gobierno se ha visto obligado a nacionalizar el gigante asegurador American International Group (AIG), y
"El mandatario aseguró que su gobierno está tomando medidas agresivas y extraordinarias ‘para calmar los mercados’."
"El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, culpó hoy a la especulación de la crisis financiera internacional, y admitió que está preocupado por los riesgos de una recesión en Estados Unidos.
"También se compadeció de la situación de los grandes bancos de Estados Unidos, que en el pasado criticaron a Brasil y a otros países emergentes, y puso en tela de juicio el sistema financiero internacional.
"No es que no estemos preocupados. Estados Unidos es la mayor economía del mundo y el mayor importador."
Los vientos huracanados del Ike financiero también amenazan a todas las "provincias" del mundo. El pronóstico meteorológico es incierto; se viene hablando de él hace semanas, y ráfagas de más de
Es muy difícil seguir de cerca y comprender las cifras fabulosas de dinero fresco que se inyectan a la economía mundial. Son grandes dosis de papel moneda, que conducen inevitablemente a la pérdida de valor y capacidad adquisitiva.
El crecimiento de los precios es inevitable en las sociedades consumistas y desastroso para los países emergentes, tal como lo señala Lula da Silva. Si el más grande importador del mundo deja de importar, golpea al resto; si sale a competir, golpea a los demás productores.
Los grandes bancos de los países desarrollados imitan y tratan de coordinar con los de Estados Unidos; si los de este quiebran, los de aquellos también, y se devoran unos a otros. Los paraísos fiscales prosperan; los pueblos sufren. ¿Acaso así podría garantizarse el bienestar de la humanidad?
Fidel Castro Ruz
Septiembre 18 de 2008