HISTORIA DE LA RED DISTRITAL DE RECONCILIACIÓN.

La Escuela de no violencia de la Red Distrital
Un espacio de reflexión para la paz.

La asistencia promedio es de 60 personas y ha permito la organización de las mesas de trabajo locales de paz y el encuentro de jóvenes, líderes comunales, adultos, niños y desplazados, con el fin de difundir la cultura de la no violencia

Ana María, una niña de 17 años, se tomó  de la mano  con la  directora de un colegio en el barrio La Ponderosa (Puente Aranda), para  realizar un ejercicio de convivencia y compartir una pequeña dinámica  con una bomba.  Ella siempre había visto a la docente como una persona que  ocupaba otro lugar por la diferencia de edad, su nivel de formación o por tener perfiles  diferentes. Sin embargo no solo para ellas la actividad fue emotiva, sino para el resto de participantes, unos 40,  que asistieron al  taller de no violencia. Este encuentro entre vecinos, jóvenes, amas de casa,, líderes comunales, estudiantes, trabajadores, desplazados  e incluso personas de la tercera edad, les permitió tener una mirada diferente con respecto a su familia, el vecino, su barrio o su territorio.

Estos talleres que son orientados por Rodrigo Parada, un filósofo y estudioso de la no violencia,  son acciones positivas que buscan bajar  las tensiones y los conflictos en las localidades, ha dejado mucho que hablar, pues sus dinámicas se convierten en incentivos entre las personas que asisten a los talleres. Todos estos se realizan en un salón de clases, en el salón de la junta de acción comunal, o en cualquier lugar de la localidad.

La logística no es mucha, pero sí se requiere  del compromiso de sus participantes. Eso sí con toda la disponibilidad del facilitador para que los participantes se motiven. Esta coordinación entre facilitador y el trabajo grupal de los asistentes, ha permitido que la Escuela de no violencia de la Red de Reconciliación de la Secretaría  Distrital de gobierno, obtenga positivos resultados al termino del taller.

Es así que  en la localidad de Engativa se realizó este fin de semana un taller con  un grupo de 40 participantes. Al término del encuentro se hizo una retroalimentación con respecto a la dinámica pedagógica, actitudes  y compromisos adquiridos dentro del proceso con el entorno de la localidad.

Son  varias las dinámicas realizadas por el facilitador. Por ejemplo: El uso de bombas que se van inflando a medida que los asistentes van pensando en una persona muy significativa en sus vidas o la realización de un trabajo colaborativo para subir una persona o dejarla nuevamente en el piso, sin que la dejen caer, por ejemplo.

Al finalizar cada sesión los asistentes dicen “qué importante y será posible realizarlo con las vecinas de la cuadra, son muy conflictivas”, o como explicó Elena Gutiérrez, una señora de 60 años,  “es posible que realice el taller en las esquinas del barrio la Florida, hay bastante conflicto con las pandillas”.

En lo transcurrido de este año, se han realizado talleres  de la Escuela de No Violencia en las localidades de Bosa, Engativa, San Cristóbal y la Candelaria, cada encuentro reúne  entre 30 y 60 participantes.

Para Rodrigo Parada, estos encuentros se convierten en un espacio de reflexión de reconciliación, para la construcción de los territorios de paz y la construcción  de acciones positivas como un clamor de la comunidad.

Oficina de comunicaciones Red de Reconciliación.