Comunicación Alternativa // ISSN 2145-390X
ESTUDIANTES DE HISTORIA INDIGNADOS CON LOS TRES CAINES
Por: Estudiantes de historia y de licenciatura en historia de Colombia.
Fecha de publicación: 25 de marzo de 2013.
Los estudiantes de historia, reunidos en el Segundo Encuentro Nacional de delegados de pregrados y licenciaturas de Colombia, nos unimos a las voces de rechazo en contra de las series televisivas, que de manera sesgada, irresponsable y errónea trasmiten parte de la historia del conflicto armado colombiano, en este caso particular la serie “Los 3 Caínes”, emitida por el canal RCN.
Consideramos que estas series carecen de una investigación responsable y rigurosa; además vemos que se encuentran desarticuladas del contexto histórico; no diferencian entre una realidad donde se ha cobrado la vida de miles de personas y un relato enmarcado en la ficción que busca una narración más atractiva para el televidente; mitificando los actores armados, justificando sus acciones y defendiendo una política guerrerista inaceptable, olvidando lo más importante: las víctimas y el proceso de reparación, paz y reconciliación al que la sociedad colombiana le está apostando, pero que se ve afectado por los intereses políticos que propiciaron la producción de dichas series televisivas.
Es evidente que la falta de control por parte de la Autoridad Nacional de Televisión y del Estado en general, representa un ataque directo a los esfuerzos hechos por las comunidades víctimas del paramilitarismo para superar los traumas de la guerra que vivimos, por esa razón cuestionamos los intereses que defiende el programa. ¿Al final, quién sale beneficiado? Si alguien sale beneficiado, es precisamente el mismo actor del conflicto desde el que se narra la historia: el paramilitarismo.
Aprovechamos la ocasión para rechazar la estigmatización que se hizo al ejercicio crítico de pensadores de las ciencias humanas, creando un consenso social en contra de su actividad académica. Esto se vio reflejado al mostrar en la serie, zonas del campus de la Universidad de Antioquia, un acto delicado e irresponsable por parte de los productores de esta serie, atentando contra la comunidad universitaria y que como consecuencia agudiza la estigmatización de la universidad pública y su crítica social.
Siendo evidente que la televisión es un medio masivo de comunicación, que ejerce influencia directa sobre la población en general, especialmente en los niños y jóvenes, que llegan a ver en estos personajes un ejemplo de vida, rechazamos rotundamente la transmisión de este tipo de narconovelas.
Fecha de publicación: 25 de marzo de 2013.
Los estudiantes de historia, reunidos en el Segundo Encuentro Nacional de delegados de pregrados y licenciaturas de Colombia, nos unimos a las voces de rechazo en contra de las series televisivas, que de manera sesgada, irresponsable y errónea trasmiten parte de la historia del conflicto armado colombiano, en este caso particular la serie “Los 3 Caínes”, emitida por el canal RCN.Consideramos que estas series carecen de una investigación responsable y rigurosa; además vemos que se encuentran desarticuladas del contexto histórico; no diferencian entre una realidad donde se ha cobrado la vida de miles de personas y un relato enmarcado en la ficción que busca una narración más atractiva para el televidente; mitificando los actores armados, justificando sus acciones y defendiendo una política guerrerista inaceptable, olvidando lo más importante: las víctimas y el proceso de reparación, paz y reconciliación al que la sociedad colombiana le está apostando, pero que se ve afectado por los intereses políticos que propiciaron la producción de dichas series televisivas.
Es evidente que la falta de control por parte de la Autoridad Nacional de Televisión y del Estado en general, representa un ataque directo a los esfuerzos hechos por las comunidades víctimas del paramilitarismo para superar los traumas de la guerra que vivimos, por esa razón cuestionamos los intereses que defiende el programa. ¿Al final, quién sale beneficiado? Si alguien sale beneficiado, es precisamente el mismo actor del conflicto desde el que se narra la historia: el paramilitarismo.
Aprovechamos la ocasión para rechazar la estigmatización que se hizo al ejercicio crítico de pensadores de las ciencias humanas, creando un consenso social en contra de su actividad académica. Esto se vio reflejado al mostrar en la serie, zonas del campus de la Universidad de Antioquia, un acto delicado e irresponsable por parte de los productores de esta serie, atentando contra la comunidad universitaria y que como consecuencia agudiza la estigmatización de la universidad pública y su crítica social.
Siendo evidente que la televisión es un medio masivo de comunicación, que ejerce influencia directa sobre la población en general, especialmente en los niños y jóvenes, que llegan a ver en estos personajes un ejemplo de vida, rechazamos rotundamente la transmisión de este tipo de narconovelas.